Presentación de Lightning Returns en Madrid

El pasado 18 de octubre tuvo lugar en Madrid una presentación de la próxima entrega de la saga de Lightning, Lightning Returns: Final Fantasy XIII. Esta presentación constó de dos partes. Primero una para prensa y medios especializados por la mañana a la que tuve la suerte de ser invitado y, por la tarde, un evento para todos los fans en la que vimos varias caras conocidas de esta comunidad. Vamos a centrarnos hoy en la visión exclusiva del juego que nos dieron por la mañana. Vaya por delante que toda la información contenida en este artículo ha estado protegida hasta hoy cuando finalmente podemos publicarla.

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La presentación comenzó nada más y nada menos que con una pequeña charla introductoria por parte de un alto cargo de Square-Enix Europa en la que, durante un periodo de diez minutos, nos explicaron las particularidades del juego, acompañado posteriormente de un vídeo ya de sobra conocido por los seguidores de la saga «Marcas Salvajes». Una vez terminado el vídeo, nos llevaron a todos a distintas consolas donde, mientras los asistentes más afortunados entrevistaban personalmente a Motomu Toriyama y Yuji Abe, Director y Diseñador de Lightning Returns: Final Fantasy XIII respectivamente, el resto podríamos probar, de primera mano, el juego durante un periodo de tiempo de una hora, cosa que nos lleva a la parte del artículo que realmente os interesa a todos los que estáis leyendo este artículo. Nosotros, desafortunadamente, no entramos dentro del reparto de entrevistas, puesto que conseguimos acceso a este evento a ultimísima hora (de hecho, la última plaza) aunque no podemos decir que nos quedáramos sin que nos firmaran algún detalle.

Lo primero que llama la atención nada más empezar a jugar es el gran bullicio de gente existente en el pequeño poblado donde comienza nuestra aventura. Esto, por supuesto, contrasta con las anteriores entregas del juego donde la interacción con otros personajes es mínima. Aquí, hay personajes para todo, tiendas de ropa, tiendas de objetos, hoteles, cocineros, cuidadores de chocobos y, lo que más me llamó a mi la atención en este aspecto…la Libraría, una tienda que sustituye al hechizo Libra (de ahí el nombre) donde podremos comprar información sobre todos los enemigos de la zona para facilitar el combate contra ellos.

Tras hablar con la gente adecuada nos encargan la misión de encontrar un enorme enemigo que está atacando a los chocobos. Este es, por supuesto, el mítico Comechocobosque, como tantos otros enemigos de este juego, repite de otras entregas de la saga (¿Quién no recuerda su reciente aparición en Final Fantasy X?). De camino a él, sin embargo, descubriremos un amplio mapa completamente abierto en el que nos encontraremos varios enemigos a los que podremos atacar en el propio mapa para obtener ventajas en el combate que nos enfrentará a ellos, entrando de lleno en la que es, sin duda, una de las grandes novedades de esta entrega, el sistema de combate.

Durante el combate dispondremos de 3 trajes distintos e intercambiables en mitad del combate, cada uno con sus habilidades, sus ataques asignados a distintos botones de nuestro controlador y su propia barra de ATB. Esto último es muy importante puesto que, si uno de nuestros trajes se queda sin ATB, podremos cambiar al siguiente y, mientras, el anterior va cargando su barra de acción. Esto a su vez añade un gran nivel de dinamismo al combate pues la barra estará casi siempre cargada en alguno de nuestros trajes y podremos combinar varios tipos de ataques con el simple uso de los botones R1 y L1. Además, existe una habilidad que permitirá detener el tiempo permitiéndonos abusar de unos rivales congelados durante un reducido periodo de tiempo.

Combates aparte, no podemos olvidar destacar lo que todos conocemos, la gran personalización que otorga al juego la existencia de los trajes. Mediante la combinación de armas, escudos, trajes y accesorios podremos obtener una miríada de trajes distintos con sus fortalezas y debilidades además de curiosos aspectos, pudiendo hasta modificar completamente los colores de cada prenda.

Intentando ver cómo sería morir en el juego a causa del fin de la cuenta atrás que le define, me fui a dormir para pasar el rato y, accidentalmente, descubrí que teníamos acceso a todo el mapa cuando Hope me llamó de vuelta a la nave a abroncarme por perder tiempo. Desde allí pude viajar a todos los mapas que se han ido presentando hasta hoy y descubrir que también contienen una gran cantidad de personajes no controlables y de misiones secundarias.

Gráficamente no os descubriré nada diciendo que el nivel es impresionante, lo es desde el Final Fantasy XIII original y no iban a ir hacia atrás en calidad, por lo que en este aspecto nadie tendrá queja, cosa que ocurre también en el apartado musical cuya banda sonora bebe mucho de las entregas anteriores con temas adaptados de lo ya conocido y nuevos temas que encajan en la tónica general del juego.

Finalmente, uno de los puntos más importantes de un buen Final Fantasy, la historia, es algo que no se puede comprobar en una demostración de solo una hora que fue dedicada a investigar y, por tanto, no podemos decir gran cosa de ello, tendremos que esperar al juego completo para valorar eso.

En resumen, el juego parece un paso adelante comparado con las dos anteriores entregas que dejaron un sabor agridulce a algunos fans de la saga y que, confío, se verá compensado por este juego que, recordemos, no pretende ser un Final Fantasy al uso y no se puede valorar por los mismos cánones. En menos de cuatro meses podremos comprobar el resultado final de tanto esfuerzo y tanto cambio en nuestros propios hogares, hasta entonces solo nos queda agradecer a Square-Enix este acercamiento de los juegos y sus creadores a los fans con eventos como el del viernes pasado y a Koch Media España por hacerlo posible aquí en Madrid poniéndonos a todos, la verdad, los dientes bastante largos viendo lo que se avecina el 14 de febrero de 2014.