
Para explicar el éxito y la longevidad de la licencia de Final Fantasy, debemos volver al primer episodio. De hecho, gracias a él comenzó todo. En 1987, la compañía japonesa Squaresoft, entonces al borde de la quiebra, pone en marcha un juego titulado Final Fantasy para terminar con una obra que fuese recordada para siempre. El nombre lo decía todo: Fantasía Final. El juego se vende más allá de lo esperado y salva a la empresa. La serie ha evolucionando con la introducción de nuevos sistemas de juego y mundos diferentes para cada episodio. Los creadores que han contribuido a hacer realidad cada entrega y que ahora son leyendas dentro del mundo de los videojuegos son: Hironobu Sakaguchi, el director del proyecto, Yoshitaka Amano, jefe de diseño, Nobuo Uematsu, el maestro de la composición musical, que crea grandes obras musicales para cada nueva entrega de la licencia.
Try again
Bueno, como es de suponer, el primer episodio lanzado para NES en 1987 acusa el peso del tiempo en la actualidad. Este conjunto de coloridos píxeles se reserva para la curiosidad de los fans actuales y para los fans que comenzaron desde el principio. Las reediciones del juego original en las consolas actuales mejoran la representación y la mecánica del mismo para hacerlo más jugable. Afortunadamente, han tomado esas medidas, ya que del juego original es inconcebible hoy. En su momento, había que pensarse muy bien la acción de cada personaje durante los combates. Ejemplo: Para atacar a un Goblin de entre un grupo de Goblins hay que elegir la opción “Ataque”, como en todas las entregas, pero hay que tener cuidado de que el enemigo al que van dirigidos los ataques no muera durante el transcurso del turno, pues todos los personajes que fuesen a golpear a ese Goblin en concreto golpearan al vacío y fallaran. Cada combate se hace largo y frustrante cuando estas acostumbrado a los otros episodios. Pero todo esto fue una revolución en 1987. Un mapamundi muy extenso y ver a nuestros personajes tratando de luchar en una batalla: Son las cosas nuevas que por aquel entonces introdujeron este tipo de juegos. Sólo los japoneses tuvieron el placer de jugarlo nada más salir al mercado pues tardo 3 años en llegar a EEUU, y nunca vio la luz en Europa hasta los remakes que se hicieron muchos años después. Para una de las consola más conocida (y de mayor venta), salio el primer remake de Final Fantasy con diversos complementos y mejoras técnicas: sale para la consola PlayStation el “Final Fantasy Origins”, que además también incluía la segunda entrega de la saga. Esto hace que este juego no se limite solo a EEUU y al mercado japonés.
Para PSP volvió a aparecer este clásico. Primero llego a los EEUU en 2007, seguido a principios de 2008 por Europa. También salio un remake para la Game Boy Advance con el nombre de “Dawn of Soul” (¡Por primera vez traducido al español!), que ofrece un nivel extra y un menú adicional para escuchar la música del juego y una opción para ver el bestiario. Esta versión en particular tiene una música 2D esplendida a pesar del formato de cartucho.

Las Profesiones
Los trabajos o profesiones son algo común de la serie y son uno de los pilares de su jugabilidad. En el primer Final Fantasy, hay seis profesiones que están disponibles desde el comienzo del juego para elegir de forma independiente por los cuatro personajes:
- El guerrero que tiene un gran potencial de defensa y ataque
- El monje que se especializa en artes marciales (sin armas).
- El ladrón, que es muy ágil, por lo que evita los golpes y roba objetos a los enemigos.
- El mago blanco cura con sus hechizos y daña a los no-muertos.
- El mago Negro, que lanza a los enemigos conjuros mágicos de diferentes elementos y propiedades.
- El mago rojo, una especie de híbrido entre el mago blanco y mago negro que tiene menos hechizos.

Un breve resumen
Después de poner nombre a los personajes como mejor nos parezca, la primera parte de la historia comienza. Al poco de desarrollarse el juego aparece en escena otra cosa que caracteriza a esta saga: los cristales, puesto todo gira en torno a estos. Para salvar al mundo hay que proteger a los cristales (Cada uno de los cuales representa un elemento.
Los cristales forman parte de la historia en muchos capítulos de la licencia.
Simplificando, sea cual sea el escenario y sus muchas idas y vueltas, el objetivo sigue siendo el mismo: acabar con el gran jefe del juego, que es simplemente una persona que al comienzo de la aventura parece que es todopoderosa. Para resumir a un novato que es “Final Fantasy”, podríamos definirlo como una aventura en la cual: sales del castillo/pueblo, nos encontramos en el mapamundi y vamos hacia nuestro siguiente destino, suceden muchas batallas al azar, los aldeanos del siguiente pueblo tienen problemas que hay que resolver, siguen sucediendo las batallas, tras derrotar a los monstruos ganas EXP y Giles constantemente. Puedes luchar un numero ilimitado de veces para conseguir Giles y EXP fuera de la historia principal, pero tienes que tener siempre puesto el ojo encima de tu HP / MP, los cuales puedes recuperar completamente en las posadas de los pueblos, o utilizando los objetos que llevas en el inventario. Queda entonces comprar equipo nuevo y los objetos necesarios para nuestra aventura a lo largo de las otras ciudades que visitaremos durante la trama y llegar hasta que el jefe final.
Guiños
Cada entrega de la saga Final Fantasy tiene lugar en su propio mundo único en el que la civilización ha evolucionado de manera diferente. La geografía y los diferentes lugares también cambian de un FF a otro. El escenario cambia siempre y es una de las cosas que hacen única y especial a esta saga. Aun así, en cada entrega hay constantes alusiones o referencias de otros FF, como por ejemplo en los enemigos del juego. Los Goblins, por ejemplo, son el primer enemigo del primer juego de FF, se pueden encontrar en Final Fantasy VII en la isla donde se encuentra la última materia de invocación: Caballeros de la Mesa Redonda. Pero es sobre todo con los Moguris y los Chocobos (que no aparecieron en el primer juego), con los que se puede identificar cada entrega. Otros guiños son el personaje Cid, que es un personaje jugable en Final Fantasy VII, pero es un NPC (personaje no jugable) en el FFXI y aparece en muchos FF ó Biggs y Wedge, guiño de las películas de Star Wars. Por supuesto no nos olvidamos de las invocaciones (Que aparecen por primera vez en FFIII) como Ramuh, Shiva y Ifrit.