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¡BASTA![/center]
Una violenta ola de poder levantó a
Girugamesshu del suelo y le empujó hacia atrás haciéndole caer de nuevo en la grieta, no sin chocar antes con la figura que emergía.
Tras unos segundos de observarla, el Joker Oscuro cerró la grieta que conectaba su santuario con el exterior y, con un movimiento de su mano la cerró.
- Ahora que sé exactamente cómo funcionan estas grietas podré prevenir la creación de ninguna más aislándonos completamente del mundo exterior.
Y así, el Joker abandonó la estancia por su propio pie, andando entre los restos de los monstruos de oscuridad caídos en el haz de luz original.
Ninguna ayuda externa llegaría a los guerreros de la luz. Sus esperanzas menguaban al tiempo que el patriarca de la oscuridad se dirigía a por su próximo objetivo. No permitiría más cabos sueltos.