A mí los cambios per se no me parecen mal, lo que me choca es que afecte a unas palabras y a otras no, dando la sensación de que lo hacen de manera arbitraria. Por ejemplo, si le quitas la tilde a los
pronombres demostrativos (esta, esa, aquella, etc.) porque según ellos no hay posibilidad de confundirlos por el contexto, deberían hacer lo mismo con los
pronombres cuya grafía coincide con otros determinantes, como los artículos (él) y los posesivos (mí, tú), en los que casi podría asegurar que hay incluso menos posibilidad de confusión que en el caso de los demostrativos. Lo mismo es aplicable a casos como el de/dé o te/té.
El "sólo" me dolió especialmente, porque la excusa para quitarle la tilde fue que era casi imposible confundir ambas palabras y que los ejemplos en los que ocurre tal cosa son muy rebuscados. A mí la frase "me voy solo a casa" no me parece tan rebuscada y ahí puede tener ambos significados. Por esa razón, yo habría optado por mantener la tilde tanto en
pronombres demostrativos como en la palabra "sólo", ya que ahora mismo hay palabras que están en la misma tesitura y a las que no se les ha aplicado esta normativa. Ya me dirás qué sentido tiene quitarle la tilde diacrítica a "sólo" y no a "té", teniendo en cuenta que en el segundo caso la posible confusión por contexto es prácticamente inexistente
Dark Aeris wrote:Esos demostrativos no llevan tilde desde el año de maricastaña. No sé vosotros, además, pero yo veo poner tilde a esas palabras a poca gente; así que no se trata de un error muy extendido.
Yo sí lo veo un error muy extendido, porque no paro de verlo incluso en periódicos (tanto en papel como online), es decir, entre profesionales de la comunicación y la escritura. Al que está acostumbrando a ponerles tildes le cuesta dejar de hacerlo. Otra cosa es el hecho de que muchos "no profesionales" no se la ponían nunca, por lo que el cambio de la norma les ha beneficiado.